Los dueños de perros piden al Consistorio una parte de Miribilla

19.06.2010 11:30

 EN LA REUNIÓN DEL PRÓXIMO MIÉRCOLES SOLICITARÁN QUE LA ZONA BAJA DEL PARQUE SE ACOTE A LAS MASCOTAS

DEIA.

BILBAO. El Ayuntamiento de Bilbao está a punto de dar el segundo paso en la posible modificación de la ordenanza de Tenencia de Animales. El próximo miércoles, 23 de junio, el Consistorio se reunirá con representantes de las asociaciones protectoras de animales y con los propietarios de mascotas. Cinco son las personas elegidas para representar al grueso de vecinos del barrio bilbaino de Miribilla y a las asociaciones animalistas en la reunión con el Ayuntamiento. El tema a negociar será el establecimiento de un horario y unos espacios específicos habilitados para que los perros puedan pasear y correr sin ataduras.

Se trata de una grata sorpresa para los amigos de los animales, quienes ya venían reivindicando al gobierno municipal la implantación de este servicio para los 19.000 perros censados en Bilbao. A pesar de la noticia, desde la Plataforma Animalista de Euskadi siguen firmes con sus convicciones, prefieren ser cautos y "no aventurar nada" antes de la reunión.

Por su parte, los vecinos de Miribilla aprovecharán la cita para proponer al Ayuntamiento que la parte baja del parque se habilite como zona de recreo canina y que en ella los perros puedan correr sin correa las 24 horas del día, ya que este terreno se encuentra actualmente "prácticamente en desudo", según asegura Isabel, vecina de la zona. En cuanto a los horarios, solicitan que de 20.00 a 10.00 horas los animales puedan pasear sueltos en todo el parque. Tal y como sucede en algunas localidades como Basauri donde existen medidas similares. El parque basauritarra de San Miguel posee un espacio habilitado de forma continuada para los perros, además de horarios para que éstos campen a sus anchas por el parque municipal. Además, cada vez son más los municipios vizcainos que adoptan estas medidas. Es el caso del Ayuntamiento de Sestao, que está dando los últimos retoques al proyecto para establecer un parque y unos horarios para los animales y sus propietarios.

LIBERTAD CONTROLADA El habilitar estas áreas no conlleva que en ellas impere el caos ni la ley del más fuerte. Según Javier Orduna, director del área de Salud y Consumo, "los dueños deberán ser aún más estrictos con el cumplimiento de la normativa". Esto significa que, además de recoger las deposiciones, deberán controlar en todo momento lo que hacen sus mascotas para evitar conflictos. Además, las razas consideradas potencialmente peligrosas deberán ir atadas y con el bozal en estos puntos. Igualmente, con la implantación de las áreas de recreo caninas, la normativa se endurecerá en el resto de la ciudad; esto es, se hará cumplir la ordenanza a rajatabla y los perros deberán ir siempre atados cuando caminen por la vía pública.

No obstante, las zonas están aún sin confirmar y los horarios sin concretar. Por ello, la reunión sirve para conocer el parecer tanto de las asociaciones animalistas como de los propietarios de mascotas. "Queremos conocer sus impresiones y que nos cuenten su parecer", asegura Orduna. Con esa información, el Consistorio continuará valorando qué horarios y qué zonas son las idóneas para este fin.

El área de Salud y Consumo, en colaboración con Obras y Servicios y la Policía Municipal, ha iniciado una ronda de consultas entre los vecinos de la villa para determinar si es posible aplicar los horarios fijos y la distribución de zonas exclusivas para animales. Asimismo, ha mostrado su preocupación por el mantenimiento de estas zonas para que no terminen convirtiéndose en vertederos. Las preguntas municipales pretenden averiguar si los vecinos están de acuerdo con la modificación de la ordenanza y, en su caso, cómo se debería llevar a cabo para beneficiar a todas las partes.

LA IMPORTANCIA DE CORRER Actualmente, en el registro de la villa de Bilbao aparecen alrededor de 19.000 perros censados que necesitan una respuesta a sus necesidades físicas, fisiológicas y etológicas. "El ejercicio físico, que corran con sus dueños y con otros perros es importantísimo para los perros y para su socialización. De lo contrario, su instinto queda reprimido y es cuando empiezan los problemas de conducta y agresividad", explica Ane Rodríguez, bióloga especializada en comportamiento animal de la empresa Neiker.